A partir de este jueves España incluirá en sus estimaciones del PIB los ingresos que aportan actividades ilegales como el tráfico de drogas o la prostitución.
De
este modo, la prostitución y el tráfico de drogas se asemejarían en términos de
PIB nominal a sectores como la educación, las actividades artísticas, las
telecomunicaciones o el suministro de energía, entre otros.
Según la primera estimación enviada por el Instituto Nacional de
Estadística (INE) a Eurostat, la agencia estadística de la Unión Europea,
la introducción de esta metodología podría incrementar el PIB español
entre un 2,7% y un 4,5%, es decir entre 27.000 y 45.000 millones de euros.
Diversos expertos coinciden en que la iniciativa elevaría un 3% la riqueza
nacional. En España la educación supone un 3,03% del PIB, el suministro de
energía eléctrica un 3,7%, la industria del petróleo un 2,6% y la agricultura
un 2,4%, informa el portal 'Bolsamania'.
Al incluir la prostitución y el tráfico de drogas, España se suma a Estonia,
Austria, Eslovenia, Finlandia, Suecia y Noruega, países que ya contabilizan
dichas actividades en sus respectivas economías.
No obstante, si en teoría la inclusión en las estadísticas oficiales de la
llamada 'economía sumergida' puede ser positiva para los países europeos,
algunos analistas advierten que la iniciativa no mejorará la situación general.
"Esto no es una solución a la desaceleración económica de Europa. Si en su
país las personas se ven obligadas a trabajar clandestinamente no podemos
hablar de recuperación saludable", advertía este verano Athanasios
Vamvakidis, jefe de estrategia cambiaria en Europa del Bank of America-Merrill
Lynch, a CNBC.