La mandataria brasileña promete a inversores reducir la deuda del sector público
"Nuestro nuevo equipo económico trabajará gradualmente, pero levantará estructuralmente nuestro superávit primario para que podamos estabilizar y reducir la deuda bruta del sector público en relación al PIB", dijo Dilma Rousseff este miércoles en su mensaje destinado a inversores, de acuerdo con Reuters.
Las misivas de la presidenta son los últimos de una serie de señales a los inversionistas respecto de que en su segundo mandato abandonará algunas de las políticas intervencionistas que sus críticos responsabilizan de los cuatro años de crecimiento económico mediocre.
Actualmente las autoridades están considerando reformas que vincularían la futura expansión del gasto público con el crecimiento económico.
El nuevo equipo económico de Rousseff trabajará también en medidas para ampliar el crédito a largo plazo de los bancos del sector privado, especialmente para proyectos de infraestructura.
Pese al mensaje de prudencia fiscal, su Gobierno aprobó el miércoles la transferencia de hasta 30.000 millones de reales (11.600 millones de dólares) al banco estatal de desarrollo BNDES, según un decreto publicado en el Diario Oficial.
Las grandes transferencias han sido criticadas por los inversores, que aseguran que los préstamos a entes estatales aumentaron la deuda bruta del país sin estimular la economía.
En el anuncio, Rousseff dijo nuevamente que el letargo económico de Brasil se debe al crecimiento lento a nivel global y los bajos precios de las exportaciones de materias primas.
Sus críticos oponen que una serie de políticas erráticas y la tolerancia del Gobierno a una alta inflación afectaron el desempeño de la mayor economía de América Latina.
Muchos analistas esperan que Brasil registre en 2015 un crecimiento sólo algo mejor que este año, cuando - según previsiones - no llegará al uno por ciento.
